Sembrada está Madrigal de casonas palaciegas, sus formas son sencillas, ángulos rectos, no levantan más de dos pisos, pero son mansiones de gran tamaño. Las fachadas son sencillas y elegantes reflejando el linaje castellano de sus propietarios.
De todas las casas palaciegas hemos escogido la que perteneció a la rica e importante familia de los Pocostales. El edificio fue construido en el siglo XV, y en origen tuvo capilla y cementerio propio, un enorme salón en la parte superior, así como un patio de columnas y galerías. En su fachada aun distinguimos dos hermosos escudos y en el dintel de la puerta labrado el escudo del santo oficio.
Juan Bernal de Pocostales, dueño del Palacio, es recordado en Madrigal por su buen hacer y generosidad, manifestada en varias obras pías, entre ellas donaciones importantes a la Iglesia de san Nicolás.